A veces sucede lo inesperado. Puede ser el dueño de negocio más responsable, pero no puede evitarlo. El clima causa estragos, la gente comete errores y las piezas fallan. Cuando la vida arroja un desastre a su empresa, es probable que desee que el seguro lo ayude. Los propietarios deben conocer las diversas políticas disponibles y buscar la mejor cobertura y ofertas, salvaguardando los activos lo mejor posible.
Responsabilidad
Incluso la persona más sabia puede tomar una mala decisión y, a veces, la gente está en el lugar equivocado en el momento equivocado. Si alguien afirma que sufrió daños en su propiedad, la demanda podría paralizarlo. Una política de responsabilidad proporciona asistencia, cubriendo a la persona lesionada.
Propiedad
Cuando ocurren desastres naturales o eventos inexplicables, simplemente podrían dejar su lugar en ruinas. Los incendios crean cenizas; el agua genera moho. El reclamo de seguro podría ser contratado, y esta póliza ayuda a pagar las reparaciones y a volver a abrir sus puertas. Si bien esperarás que nunca pase nada, simplemente puede estar fuera de tu alcance. Esta es la copia de seguridad, en caso de que la vida te arroje la bola curva. No te balancees y falles. Haz un jonrón y asegúrate de que te paguen por lo que necesitas. Si aún es difícil pensar en pagar las primas sin obtener siempre una recompensa, busque cobertura de grupo de seguro cautivo. La prima se convierte en una inversión cada año, por lo tanto, es posible que pueda recibir ganancias de ella.
Interrupción del negocio
Si la tienda necesita cerrar por reparaciones, se queda sin ingresos por un tiempo. El seguro de propiedad típico se centra en las reparaciones, pero no paga la hipoteca o la factura de servicios públicos. La interrupción del negocio ayuda en estos aspectos. Podría significar evitar un préstamo importante o pedir ayuda al banco.
No te dejes expuesto. Es difícil emitir un cheque de seguro cada año, pero, cuando el techo gotea o la tubería se revienta, puede estar agradecido de tenerlo.